Cuando tienes a tu cargo un equipo de trabajo, es importante tenerlo motivado y contento para que su rendimiento sea el mejor.
Sin embargo, el absentismo o ausentismo laboral es uno de los problemas más graves y recurrentes en las empresas. Este problema tiene consecuencias tanto económicas como en el bienestar de los trabajadores.
A continuación te explicamos un poco más sobre este problema y qué puedes hacer para controlarlo.
¿Qué es el absentismo laboral?
Según la RAE, la palabra “absentismo” es la “abstención deliberada de acudir al lugar donde se cumple una obligación” o como segunda acepción “abandono habitual del desempeño de funciones y deberes propios de un cargo».
Algunas veces, este absentismo no se produce por causas justificadas, pero en la gran mayoría de los casos sí.
Para definirlo de una manera más concreta, el absentismo laboral se refiere concretamente al número de horas en las que el trabajador no está trabajando con respecto al número de horas por el que está contratado.
Por tanto, si tienes un trabajador contratado durante 8 horas, pero su rendimiento es menor deberás detectar que está ocurriendo para que no solo sea rentable el salario que le pagas si no para descubrir el porqué de estos momentos de ausencia laboral.

Tipos de absentismo laboral
Según el origen del comportamiento y la forma de evidenciarse tenemos distintos tipos de absentismo laboral en las empresas:
Absentismo justificado
Es aquel que aunque la persona no está desempeñando su papel tiene un motivo por el cual no lo está haciendo y la empresa está al tanto de ello.
Un caso de absentismo justificado puede ser una baja por enfermedad, vacaciones, permisos personales (boda, nacimiento, exámenes oficiales, etc.).
Absentismo injustificado
Este absentismo es cuando se produce una ausencia literalmente del trabajador y no se sabe el motivo por el cual se ha producido.
Cualquier falta en el trabajo que no esté autorizada puede ser clasificada como ausentismo laboral injustificado. No tiene que ser una falta total de un día de jornada, puede ser llegar tarde sistemáticamente, retrasarse después de volver del desayuno, etc.

Absentismo presencial
Este caso de absentismo es de los más comunes y está directamente relacionado con la productividad.
En este caso, la persona está en su puesto de trabajo pero no está desempeñando funciones productivas para la empresa. ¿A qué nos referimos exactamente? Pues que la persona puede estar en su puesto pero navegando en internet, realizando otras tareas, perdiendo el tiempo en el móvil, etc.
Este es uno de los absentismos que más cuesta detectar y corregir para las empresas, aunque no por ello hay que darse por vencido. Lo más importante es llegar a la raíz del problema.
Los motivos principales suelen ser: falta de expectativas, falta de motivación, bajo nivel de compromiso, metas muy duras de alcanzar o poco desafiantes, etc.
Absentismo emocional
El último tipo que queríamos explicar es el absentismo emocional. Este tipo de ausencia está también relacionada con el rendimiento del trabajador en su puesto pero suele ser más personal.
Este absentismo puede venir ocasionado por diversos factores motivacionales que hacen que el rendimiento sea inferior al normal, problemas familiares o personales, falta de inteligencia emocional, etc.
Por tanto, esta clasificación no es excluyente ya que podemos tener un tipo de absentismo presencial que también puede ser el absentismo emocional o incluso que se den varios tipos de absentismo combinados en una misma persona.
¿Cómo puedes reducir el absentismo laboral de tus trabajadores?
- Entrega por escrito una política de asistencia muy clara en tu empresa. Debe estar registrado que ocurre en caso de absentismo y qué consecuencias puede conllevar para cada parte.
- Establecer de forma clara las expectativas de asistencia y recompensar a los empleados que cumplen. Cuando no hay directrices claras pueden llevar a confusión interna o malas interpretaciones.
- Proporcionar apoyo a los empleados si es necesario. Si detectas que estás frente a un caso de absentismo emocional o presencial pero relacionado con la motivación o las expectativas, se parte activa del proceso para solucionarlo.
- Facilita el diálogo con los trabajadores. Establece canales de comunicación claro bidireccionales por si es necesario trasladar opiniones, sentimientos o cualquier otro tipo de información relacionada con el puesto de trabajo que se está desarrollando antes de que surjan problemas.

¿Cómo se puede prevenir el absentismo laboral?
Si nunca has tenido casos de absentismo en tu empresa es muy buena noticia, pero te recomendamos que no bajes la guardia y tomes ciertas medidas para prevenir la ausencia laboral.
- Se consciente de la carga de trabajo de cada empleado para corregir los desajustes adaptando a cada persona.
- Incrementa las capacidades de tus empleados promoviendo hábitos de vida y de trabajo saludables.
- Intenta ofrecer una jornada continua o que se ajuste a las necesidades de cada uno.
- Ten una buena política de conciliación familiar, racionalización de horarios y política de turnos si es necesario.
Pues hasta aquí lo que queríamos contaros sobre el absentismo laboral y todos los problemas que puede llegar a ocasionar en el funcionamiento de nuestra empresa. Recuerda que los empleados son personas y cuanto más humano sea nuestro trato, mejor será su rendimiento en la empresa.
Si buscas perfiles muy concretos para tu empresa, te recomendamos que lo hagas en https://www.trabajaenmedioambiente.com/empresas/ poniendo tus anuncios de manera gratuita o destacada para salir en las primeras posiciones. Cuanto más motivado y adecuado sea el candidato que escojas más probabilidades tienes de que su rendimiento sea el mejor.
Si tienes cualquier duda escríbenos y nos vemos en la siguiente.
¡Suerte!
Déjanos un comentario o pregunta