Un gran obstáculo con el que nos solemos encontrar a la hora de buscar empleo somos nosotros mismos. Aunque pueda parecer una frase de Mr. Wonderful impresa en una taza de café para la oficina, es la realidad cuando hablamos de motivación. Porque buscar trabajo es un trabajo en sí mismo. Pero como (de momento) no está remunerado, la motivación que tengamos va a ser la única fuerza que nos mantenga activos en esa búsqueda.
Lo primero es ser franco con uno mismo y tener claro cuál es nuestro objetivo. No el que otros quieren o esperan de nosotros (Si quieres ser Abogado de accidentes de auto o sexador de pollos nadie te lo impide). Para acto seguido ponernos manos a la obra para mejorar en todo lo que necesitamos para alcanzar la meta (estudios, cursos, habilidades, etc). Y si es necesario a mitad del trayecto variar el rumbo porque nuestras metas han cambiado, tomar como un aprendizaje el pasado y continuar hacia adelante.
Porque ser optimista, o estar motivado, es algo que se puede construir. Para ello es muy recomendable establecer pequeñas gratificaciones diarias, premios a pequeña escala que nos ayuden a terminar el día. También es importante no idealizar la meta (o cuando lleguemos nos sentiremos vacíos) y disfrutar del viaje, pues de cada vivencia podemos aprender para aplicar mejores soluciones en el futuro.
¿Con la motivación se nace o se consigue?
Teniendo claro desde un principio que va a ser la propia motivación lo que nos impulse en nuestro trabajo diario de búsqueda de empleo podremos gestionar mucho mejor nuestros logros y derrotas. Porque habrá derrotas, muchas. Cada currículum descartado en un proceso de selección, cada email no respondido, cada “muchas gracias pero…”, cada entrevista con la que no sales con buen sabor de boca, cada día que termina sin haber alcanzado la meta…
Pero seamos conscientes de que la derrota, el desánimo, incluso la tristeza, es algo normal en nuestras vidas y sólo debemos aprender, evaluar y tomar decisiones para solucionar los posibles problemas. Porque seguro que hay aspectos que podemos mejorar igual que se puede mejorar un currículum para que refleje mejor nuestros logros y puntos fuertes, o igual que se puede preparar una entrevista para sentirnos seguros y confiados al hacerla.

Si te es difícil mantener la motivación tienes 3 pequeñas claves que te ayudarán a conseguirlo:
- La incertidumbre es un estado habitual en el mercado laboral actual. Se acabó el trabajo para toda la vida como tenían nuestros padres o abuelos. (A no ser que tu objetivo sea aprobar una oposición para alguna administración pública). Así que tocará invertir mucho tiempo y esfuerzo sin tener seguros los resultados.
- Entender qué factores de nuestro entorno dependen de nosotros y cuáles no. El resultado de una entrevista de trabajo no sólo depende de nuestro desempeño. Existen muchos factores que dependen de la empresa, la persona de recursos humanos, el nivel de los demás candidatos…
- Establecer algún tipo de sistema para automotivarnos como premiarnos por los pequeños pasos o aprendizajes conseguidos cada día. Aunque sólo sea escribir en nuestro diario/agenda aquello que hemos conseguido o aprendido nos ayudará para que cada día se diferencia del anterior.
Optimizar nuestro trabajo de encontrar trabajo
Y para terminar, siete tips sencillos para optimizar nuestro trabajo diario de buscar el empleo soñado:
- Organizarse. Buscar trabajo es un trabajo y tener un método y ser organizado nos ayudará a obtener mejores resultados.
- Reflejar en nuestro CV lo que de verdad nos representa como profesionales incluyendo la información que sume puntos en nuestro objetivo laboral.
- Asumir que no vamos a encajar en todas las ofertas de empleo, hay aspectos que no está en nuestra mano cambiar. Y aún así habrá algunas en las que merecerá la pena apuntarse y otras en las que no nos ayudará perder el tiempo.
- Pedir ayuda es una buena idea y para empezar es importante que todo el mundo a tu alrededor sepa que buscas empleo y en qué eres bueno.
- Nunca digas que no. Cada experiencia te dará visiones diferentes y conocer a todo tipo de personas o enfrentarse a retos es un aprendizaje muy valioso.
- Tampoco hace falta pasarse de optimista. Sobreestimar nuestras capacidades tampoco nos ayudará a afrontar los retos del mercado laboral, así que en el equilibrio está la clave.
- Revisarse a uno mismo y ser realista, para mejorar en nuestro desempeño pero sin caer en el desánimo.
Si te han parecido interesantes estas ideas te invito a escuchar la entrevista que Nacho García le hizo a la investigadora en Psicología Estefanía Rodríguez que ha servido de inspiración para este artículo:
Escucha «De la motivación y el desánimo, con Estefanía Rodríguez» en Spreaker.
Déjanos un comentario o pregunta