En esta era la palabra emprender ha empezado a tomar cada vez más protagonismo, mucho se habla de iniciar un emprendimiento, proyecto o concretar una idea de negocio. El nuevo ecosistema emprendedor ha ganado terreno y nos ha brindado una nueva forma de ingresar al sector productivo o laboral.
Afortunadamente, junto a estas nuevas oportunidades de mercado, también han crecido los intereses en un estilo de industria diferente, direccionada a la sostenibilidad. Las demandas de los nuevos consumidores, las crecientes necesidades de producir cuidando el medio ambiente y las leyes que acompañan estas iniciativas han dado lugar a emprendimientos que, además de ofrecer un producto o servicio, también tienen presentes las alternativas sostenibles durante todo el proceso industrial.

Desde pequeñas acciones como comprar sobres de cartón para aquellos envíos postales que requieran realizar, a aquellos cambios más disruptivos como incorporar el teletrabajo para disminuir la movilidad y la consecuente contaminación producto del uso de automóviles u otros medios de transportes que no sean cero carbono.
Sea cual sea la acción que se incorpore, es innegable que emprender en esta época debe ser de forma sostenible si se pretende crecer y ganar la confianza de nuestros clientes. Cuando antes era una novedad que una empresa incorpore medidas para cuidar el ambiente, hoy es una tendencia de la que ningún emprendedor puede desprenderse. Este novedoso estilo de industria sostenible está conquistando el mercado actual y generando un futuro más esperanzador.
En un rápido repaso de las principales cuestiones a tener en cuenta a nivel medioambiental a la hora de emprender, encontramos las siguientes consideraciones.

- Uso eficiente de la energía: sobre este aspecto puede plantearse el uso de energías renovables en la cadena productiva, así como también acciones de cuidado y uso racional de la energía, como ser desenchufar los electrodomésticos que no se utilicen, utilizar lámparas led, ajustar la temperatura de los sistemas de refrigeración y calefacción.
- Gestión de residuos: implementar medidas adecuadas para disminuir los residuos producidos, como ser sistemas de reciclaje industrial, reutilización u optimización de recursos.
- Incorporación de ecodiseño: construir tus productos o servicios desde un punto de vista ambiental, teniendo en cuenta este aspecto durante todo el proceso productivo, desde su creación hasta el final de su vida útil, utilizando materiales procedentes de fuentes renovables, con bajo consumo energético, etc. Dentro de este aspecto no debemos olvidar la presentación de nuestros productos o servicios, donde el packaging debe estar enfocado al cuidado del medio ambiente.
- Producción de cercanía o local: son múltiples las ventajas que se obtienen de generar un circuito productivo de proximidad, como factor principal la disminución de emisiones provenientes del transporte, y así también el uso de energía para la conservación o almacenamiento de los productos.
- Capacitarse y promover medidas de cuidado ambiental: ya no es suficiente con crear una industria sostenible, también es necesario estar al día de las leyes y novedades ambientales que van moldeando este nuevo ecosistema productivo. Asesorarse y capacitarse para acompañar el cambio de paradigma que estamos viviendo, es una condición fundamental para ser un emprendedor exitoso en estos tiempos.
Ahora que ya reconoces los principales aspectos ambientales a tener en cuenta si vas a emprender, comienza el camino más difícil, pero también el más motivante: generar tu propio negocio o proyecto industrial. Si estás leyendo este artículo es porque hay un espíritu emprendedor en ti, no lo dejes dormido y aventúrate a los desafíos del emprendedurismo con pasión y coraje.
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